Según los responsables de Flebasa, su objetivo era crear un servicio directo entre la península y la isla de Menorca, mediante la prolongación de la línea regular Vilanova i la Geltrú-Alcúdia, de manera que el recorrido del ferry terminase e el puerto de Ciudadela.

El Ejecutivo balear ha remitido un escrito a Flebasa en el que indica que las infraestructuras portuarias no están en condiciones para poder efectuar el atraque del buque, por lo que la naviera se ha visto obligada a paralizar sus planes, "en espera de que el Ejecutivo balear reconsidere su postura y valore los beneficios sociales y económicos que supondría este enlace".

Flebasa asegura que el ferry Antonio Machado, embarcación de cien metros que cubriría el nuevo servici y que tiene una capacidad para 350 personas y 120 vehículos, está dotado de unos sistemas que le permiten una gran maniobrabilidad en la entrada y salida del puerto.