Sanidad

El Gobierno de Ayuso lanza un mensaje de tranquilidad sobre la viruela del mono y descarta una vacunación “masiva”

MADRID
SERVIMEDIA

La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, lanzó este miércoles un mensaje de tranquilidad a la población por la alerta sobre la nueva variante de viruela del mono y dijo que la vacunación “no ha de ser masiva” en este momento, puesto que “el riesgo de contagio es bajo”.

Así lo trasladó Matute a los medios de comunicación tras la reunión mantenida este miércoles con el Ministerio de Sanidad sobre la nueva variante de mpox, más contagiosa que las anteriores.

Matute aseguró que la Comunidad de Madrid está preparada para hacer frente a esta alerta sanitaria y recordó que desde 2022 “tenemos viruela del mono entre nosotros y hemos sido capaces de curar esos casos y evitar que exista una transmisión comunitaria”.

Por ello, continuó Matute explicando que cuando el 8 de agosto “África alertó de la existencia de esta nueva variante más grave y transmisible nos pusimos a trabajar actualizando los protocolos, reforzando el diagnóstico y el seguimiento, informando a los centros sanitarios, a nuestros profesionales sanitarios y reforzando la vacunación”.

Matute subrayó que, cuando la OMS declaró la alerta sanitaria, en la Comunidad de Madrid “ya teníamos actualizados e implantados todos estos protocolos” y que está “al tanto de lo que pueda ocurrir, por si hay variaciones en el perfil epidemiológico en la transmisión” con la finalidad de “detectarlo de forma precoz y actuar inmediatamente”

“En cualquier enfermedad la prevención es fundamental”, defendió, a la vez que concretó que, en el caso de la viruela del mono, “una de las cosas que hacemos para prevenir es vacunar”.

Sin embargo, sostuvo que “no hay que alarmar a la población porque la vacunación no ha de ser masiva”, ya que las indicaciones en el momento actual contemplan vacunar a “personas que tienen prácticas sexuales de riesgo y o con múltiples parejas, personas que han tenido un contacto estrecho con un paciente, profesionales que tienen contacto estrecho directo con pacientes o con secreciones derivadas de estos pacientes y pacientes inmunodeprimidos”.

No obstante, apuntó a que es el médico quien evalúa “caso por caso y dice si hay que vacunarse”. Además, explicó que los viajeros que vayan a África “si no tienen prácticas de riesgo no tienen por qué vacunarse”.

Matute insistió en que la sanidad exterior "tiene que hacer su trabajo” y dijo que pedirlo “no es ser alarmistas”, pues defendió que “hay que informar a la población” y “detectar cualquier enfermedad que esté en el aeropuerto y por eso hay que formar e informar a la tripulación de los vuelos y si detecta un paciente que pueda tener vesículas en la mano en la cara es su obligación que informe a las autoridades sanitarias para que actuemos”.

“Esto no es alarmar, esto es hacer las cosas bien porque creemos que es fundamental implantar un procedimiento en los aeropuertos que, en función del nivel de alarma y el nivel de la enfermedad, nos pueda permitir desplegar una serie de escenarios que ya tenemos que tener preparados”, añadió la titular de la Consejería de Sanidad madrileña, quien aclaró que no se refiere ahora mismo “ni a cerrar fronteras ni a restringir vuelos”.

(SERVIMEDIA)
21 Ago 2024
ARC/pai