Esta idea fue manifestada en primer lugar por el consejero de Presidencia y Relaciones Institucionales, Ramón Tejedor, y posteriormente rtificada por el propio José Marco.

Las razones esgrimidas pueden estribar en el alto coste que se derivaría de regionalizar la segunda cadena de TVE, cifrado en 600 millones de pesetas anuales por una hora de desconexión diaria, según la oferta realizada a principios de semana por el director general de Radiotelevisión Española, Jordi García Candau, a varios presidentes autonómicos entre los que se encontraba el aragonés.

Lo que sí dejaron claro los dirigentes socialistas es que no se retomará elproyecto concebido por el anterior consejero de Presidencia, el nacionalista José Angel Biel, basado en un estudio realizado por una empresa dirigida por el periodista de Antena-3 de Televisión Manuel Campo Vidal y redactado por el también periodista Baltasar Magro.

El presidente aragonés quiere una televisión ágil y mujeres. En cualquier caso, José Marco ha dicho que hay que debatir las tres posibilidades en torno a una televisión aragonesa: la regionalización de la segunda cadena de TVE, un acuerdo on Antena-3 de Televisión o el tercer canal, que ha sido reclamado por las Cortes de Aragón al Gobierno central por cuarta vez.