Gil mencionó además al ex vicepresidente de la Junta de Andalucía José Miguel Salinas como el receptor de 200 de los 220 millones qu le exigieron como comisión para construir en Marbella varias urbanizaciones privadas. Los 20 millones restantes de esta operación fueron a parar, según el alcalde marbellí, al padre de Salinas, José Salinas González, y a su abogado.

El presidente del Atlético de Madrid llegó a decir en la tertulia de "Protagonistas", en Onda Cero, que "hubo que regatear (la cifra) porque al principio querían 280 millones".

También se refirió Gil y Gil a otro proyecto urbanístico en Madrid por el que supuestament pagó 85 millones de pesetas más, cantidad entregada a "un amigo de Felipe González", que no nombró, pero al que definió como "el que da sus fotos dedicadas".

En total, el alcalde de Marbella admitió haber pagado comisiones por valor de unos 400 millones, "entre comisiones directas e indirectas", e insistió en que puso en conocimiento de Alfonso Guerra, entonces vicepresidente del Gobierno, la existencia de la supuesta red de cobro de comisiones.

Según Gil, le respondieron que lo dejara estar. "Eto (la red de cobros) se lo mandé a Guerra a través de un familiar mío hace ya dos años", dijo el edil de Marbella, "y me dijeron que calladitos".

"NO QUIERO PRESENTAR DENUNCIA"

Sin embargo, Gil rechazó presentar una querella contra las personas mencionadas por considerar que sólo conseguiría complicaciones y tampoco prosperarían ante la oficina del Fiscal General de Estado, Eligio Hernández. "Si me voy al fiscal éste del pesebre", dijo, "al final me procesa a mí tres veces más".

Por otra parte fuentes de la Junta de Andalucía, donde José Miguel Salinas era vicepresidente cuando se produjeron los supuestos pagos, no quisieron manifestarse sobre las acusaciones de Gil, ni sobre la supuesta mediación que el alcalde de Marbella imputa al actual consejero de Economía de la Junta, Jaime Montaner.