En su argumentación, el PP señala que con el traspaso de la colonia británica de Hong Kong a la soberanía china el 1 de julio de 1997 surgieron "las inevitables comparaciones con la situación anómala de Gibraltar".

Explica que "la isla de Hong Kong fue otorgada a Gran Bretaña 'a perpetuidad' por el Tratado de Nakín en 1842", mientras el Tratado de Utrecht de 1713 "cedió a Gran Bretaña, también a perpetuidad, la ciudad, el castillo de Gibraltar, su puerto, sus defensas y las fortalezs que le pertenecen" y sin comunicación por tierra con el Reino de España.

Advierte la proposición que mientras Hong Kong fue devuelto a China como consecuencia de negociaciones entre este país y el Reino Unido, "y sin consultar a la población local", las autoridades gibraltareñas han manifestado su voluntad de cambiar el status actual del Peñón a través de una revisión "constitucional" que concluiría con un estatuto parecido al de las islas de Jersey y Guernsey, o bien una integración directa en el Rino Unido.

Por ello, la proposición insta al Gobierno a "reiterar que España no reconoce al Reino Unido más soberanía sobre Gibraltar que la que se deriva del artículo X de Tratado de Utrecht y que la ocupación del istmo es ilegal y contra el Derecho Internacional".

Asimismo, propugna continuar el diálogo con el Reino Unido, dentro del marco de la Declaración de Bruselas, para resolver el problema de Gibraltar, e impulsar este asunto en el seno de las Naciones Unidas, especialmente dentro del Comté de los 24.

La proposición no de ley del Grupo Popular insta al Gobierno a reiterar el rechazo a cualquier modificación del statuts actual de Gibraltar contrario a lo estipulado en el Tratado de Utrecht, a las resoluciones de la Asamblea General de la ONU sobre el tema y a la Declaración de Bruselas.