El primero de los actos se celebrará el proximo sábado en la localidad vizcaina de Gernika, donde los pacifistas se reunirán alrededor de la escultura de Eduardo Chillida, que simboliza la libertad y la toleranca.

Una semana más tarde, los pacifistas vascos coronarán las cumbres más altas de los montes del País Vasco donde colocarán pancartas exigiendo a ETA la libertad del empresario guipuzcoano. Ademas, Gesto por la Paz realizará diariamente movilizaciones en aquellas localidades en las que cuenta con un grupo de trabajo.

Según Gesto por la Paz, "si todas las palabras de rechazo estan ya dichas, convendría recordar lo que un secuestro supone para la víctima, la terrible situación que tiene que vivir: ivir cada día, y ya son 135, con la incertidumbre de saber si sus secuestradores le permitirán vivir un día más".

La portavoz de Gesto por la Paz, Itziar Aspuru, ha reiterado que este movimiento no participará en las reuniones del llamado Grupo de Maroño, que incluye a otros pacifistas y a organismos de la izquierda abertzale, como las Gestoras Pro-amnistía.

Aspuru ha explicado que el documento que este grupo redactó en la localidad navarra de Alsasua y que Gesto no firmó, equipara los derechos clectivos a los individuales, la libertad de Aldaya con la libertad de Euskadi.

Gesto por la Paz considera además muy difícil seguir compartiendo mesa con grupos como Gestoras Pro-amnistía, que promueve las concentraciones frente a los pacifistas de las que parten las agresiones a los pacifistas que reclaman la libertad de Aldaya.