Según explicó, la solicitud de Gescartera cumplía "todos los requisitos materiales y procedimentales" para acceder a la transformación y cualquier consideración sobre el estado de las cuentas de la sociedad "quedaba fuera de las competencias del Ministerio de Economía ya que el órgano superisor es la CNMV".

Folgado firmó la orden ministerial de autorización para que Gescartera se transformara en agencia de valores el 1 de septiembre de 2000, tras ser aprobado por el Consejo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Según explicó en su intervención, el Ministerio de Economía no era el encargado de verificar si los datos aportados por los responsables de Gescartera para la conversión eran correctos.

El secretario de Estado de Economía informó que los controles sobrelas agencias de valores son muchos más estrictos que los exigibles a las sociedades de cartera, que era la naturaleza de Gescartera antes de septiembre de 2000.

A este respecto, agregó que aquéllas deben tener un volumen de recursos propios suficiente para preservar la solvencia y liquidez y están sometidos a controles mensuales de sus cuentas mientras que las sociedades de cartera sólo tienen controles semestrales y menos estrictos.

En lo que sí tuvo mucho cuidado Folgado fue en afirmar que el sstema financiero español es "uno de los más solventes de Europa y del mundo".

Por ello, continuó, "no podemos aceptar que el comportamiento fraudulento de una empresa manche de alguna forma la reputación de nuestro sistema financiero, que funciona de manera adecuada y solvente y ofrece a los ciudadanos posibilidades de inversión diversificadas y seguras".