Según informaron fuentes jurídicas, de lo declarado por Alberquilla ante la juez Teresa Palacios, que instruye el "caso Gescartea", se deduce que Hacienda conoció al final de cada año las plusvalías y pérdidas que la sociedad de valores imputaba a algunos clientes.

Estas operaciones consistían en que a determinadas personas, como el cura de Cuenca Teodoro Bonilla, se le asignaban unas pérdidas o ganancias por operaciones bursátiles, sin que el movimiento llevado a cabo por Gescartera procediera de dinero de estos clientes, sino de otros.

Al mismo tiempo, Alberquilla, que prestó declaración durante unas seis horas, indicó ue el HSBC desconocía la agencia de valores que dirigía Antonio Camacho estuviera asignando pérdidas a determinados clientes, cuando éstas correspondían a otros inversores.

El ex directivo sostuvo que, para detectar la existencia de estos testaferros, es necesario hacer una investigación específica para saber quién está detrás en las inversiones.

El ex director de operaciones del HSBC también aseguró ante la juez Palacios que los movimientos que su entidad bancaria realizaba por operaciones "intr día" eran por órdenes de Gescartera, que es la que daba instrucciones al respecto.

Lo prolongado de la comparecencia de Alberquilla hizo que la juez pospusiese hasta mañana la declaración de Salvador Pastor, el director general del HSBC Investment Bank en España, que ya realizó una primera declaración en la Audiencia Nacional el pasado 13 de noviembre. Ese día, Pastor negó que conociese las existencias de cuentas opacas en su banco o que hubiera colaborado con Antonio Camacho en las operaciones de Gecartera.