GESCARTERA. UN ALTO CARGO DE LA CNMV DEFIENDE SU ACTUACION ALEGANDO QUE IGNORABA QUE SU PRIMO FUESE ABOGADO DE GESCARTERA

MADRID
SERVIMEDIA

El director general de Entidades de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Juan Caros Basallote, aseguró hoy que no sabía que su primo Alberto Alonso Ureba era abogado de Gescartera y que, de saberlo, "habría decidido no intervenir" desde su cargo en la CNMV en nada referente a la sociedad de valores.

Basallote, que compareció ante la comisión de investigación sobre Gescartera en el Congreso, recordó que fue nombrado en su cargo en octubre de 2000, a propuesta de la entonces presidenta de la CNMV, Pilar Valiente, a quien conoció anteriormente a través de su primo Antonio Alonso Ureb, secretario de la CNMV, en dos encuentros entre amigos.

El director de Entidades de la Comisión del Mercado de Valores, que antes de llegar a su puesto había trabajado como profesor en la Universidad de Cádiz y en departamentos de marketing de empresas de distribución de licores, explicó que fue él quien procedió a la inscripción de Gescartera como agencia de valores en enero de este año, tras cumplirse los requisitos aprobados por la CNMV para autorizar dicha conversión.

Basallote detalló que ls condiciones que se cumplieron para la inscripción como agencia de valores fueron la entrada de la Fundación ONCE como dueña del 10 por ciento de Gescartera Dinero, la salida de Antonio Camacho del equipo directivo de la entidad, la entrada de José Manuel Pichel, entonces director general de la Fundación ONCE, como consejero delegado en representación de la fundación y el refuerzo de la sociedad con personal cualificado procedente de la entidad benéfica.

Estas condiciones fueron establecidas por una esolución del Consejo de la CNMV y la orden ministerial correspondiente, que tomaron como base las propuestas hechas por la propia Gescartera. Tras la autorización de la CNMV, Gescartera solicitó la inscripción como agencia de valores el 2 de enero de 2001 y la misma se materializó a finales de ese mes.

Sin embargo, hay otro pliego de condiciones que Gescartera no había cumplido en esa fecha y que consistían en la entrada de la Fundación ONCE con el 25% de Gescartera Holding, la creación del Consejo d Administración de esta entidad, previa dimisión de Camacho como administrador único, y la transformación del holding en sociedad anónima.

Basallote explicó que existían "dos cuerpos de condiciones", el primero imprescindible para la inscripción como agencia, que ya se había cumplido, y el segundo, que definió como "proyecto de futuro" y que él mismo se encargó de comprobar que se estaba cumpliendo entrevistándose con los nuevos dirigentes de la entidad, encabezados por Pichel.

En cambio, tanto e comisionado socialista Antonio Cuevas como Jordi Jané, de CiU, sacaron a relucir una carta dirigida por Basallote a Javier Sierra, administrador de Gescartera, en la que le comunica que "no queda acreditado el cumplimiento de determinados elementos que motivaron en su día la autorización de transformación" y cita como tales las condiciones que previamente Basallote había calificado como "proyectos de futuro".

Cuevas interpretó que Basallote inscribió a la agencia sin que ésta cumpliera unas condicions que él mismo había exigido y Jané puso de manifiesto la contradicción existente entre lo escrito en esa carta y lo expresado hoy ante la comisión.

Por su parte, el diputado de IU Felipe Alcaraz también dijo no creerse lo declarado por Basallote y le recriminó que no hubiera comprobado la "honorabilidad" de los gestores de Gescartera, otro de los requisitos necesarios de acreditar para convertir una sociedad en agencia de valores.

Pedro Azpiazu, del PNV, también se mostró "perplejo" ante las conradicciones de Basallote y manifestó que "parece que la empresa era de la CNMV y no de Camacho".

(SERVIMEDIA)
16 Oct 2001
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