GESCARTERA. ADICAE VE UNA "GRAVISIMA RESPONSABILIDAD" DE LA CNMV POR OCULTAR A LOS INVERSORES LAS SANCIONES A LA OCIEDAD

- El presidente de Adicae denuncia una "hostilidad manifiesta" de Ramallo y Alonso Ureba hacia su presencia en el Comité Consultivo de la CNMV

- Confirma que Gescartera usaba el apellido Giménez-Reyna y la "garantía" de la Iglesia y la ONCE para captar clientes

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Asociación de Usuarios, Inversores de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae), Manuel Pardos, denunció hoy en el Congreso que la Comisión Nacional del Mercado de Valore (CNMV) tiene una "gravísima responsabilidad" en el fraude cometido por Gescartera.

Pardos afirmó, ante la comisión de investigación sobre Gescartera, que la CNMV "quebró" el principio de defensa de los ahorradores al no hacer públicas e incluso ocultar las irregularidades registradas en la sociedad de valores desde hacía años.

"Si se hubieran comunicado las sanciones, se habrían frenado nuevas inversiones", dijo Pardos, quien criticó a aquellos que, como Pilar Valiente, ex presidenta de la CNMV,esgrimieron que ningún usuario había reclamado nunca.

"Era imposible que los afectados se dieran cuenta porque todo estaba hecho para engañar, bajo la apariencia de legalidad, y tendrían que haber sido los órganos reguladores quienes detectaran que había una trama de dinero negro o especulación de todo tipo", indicó Pardos. "Los únicos que sabían las irregularidades eran la CNMV".

El presidente de Adicae relató que él mismo formó parte del Comité Consultivo de la CNMV entre 1996 y 2000 y ni siquira allí llegó la información sobre las sanciones impuestas a Gescartera, ya que a éste comité únicamente se le comunicaban las faltas calificadas como muy graves y las de esta agencia sólo eran graves. A su entender, hubo un "interés en ocultar" dichas sanciones.

RAMALLO Y ALONSO UREBA

Lo que sí constató en este Comité Consultivo durante los cuatro años en los que formó parte de él fue un "comportamiento extraño" del entonces vicepresidente de la CNMV, Luis Ramallo, y el secretario, Antonio Alonso Ueba, quienes, según Pardos, mostraban hacia él una "hostilidad manifiesta".

El representante de los usuarios recordó que con Ramallo, que era presidente de la Comisión Consultiva, "no se podía discrepar de las decisiones adoptadas" por el Consejo de la CNMV y que llegaron a tener "enfrentamientos personales" que terminaron con la salida de Adicae de esa comisión.

Posteriormente, Pardos llegó a la conclusión de que "se me quería sacar de allí a la vista de lo que podía venir con casos como Gescartra".

En cuanto a Alonso Ureba, no quiso calificarle como un "manipulador de actas", pero destacó la dificultad que siempre encontraba para que se reflejara en las mismas lo discutido en las reuniones o alguna petición específica. "No había manera de meter cosas en el acta", dijo.

APELLIDO GIMENEZ-REYNA

El presidente de Adicae dijo que, para captar nuevos clientes, Gescartera utilizaba el apellido Giménez-Reyna y el hecho de contar entre sus clientes con instituciones como la Iglesia o la ONCE, omo "garantía de seriedad y solvencia", así como unas "buenas relaciones" con la CNMV. Incluso llegaron a facilitar a alguno de los inversionistas la auditoría realizada por Deloitte & Touche.

Pardos, cuya asociación representa a unas 700 familias, con más de 1.000 afectados por el fraude de Gescartera -de un total de 2.000-, explicó que el perfil de los perjudicados es el de una inversión inferior a 5 millones, procedente de indemnizaciones por prejubilación o despido, ahorros, herencias o liquidacioes de negocios y atraídos por la bonanza de la bolsa, pero con poca formación sobre los productos que se les ofrecían.

El presidente de Adicae indicó que su asociación ha instado a que se adopte el procedimiento judicial de quiebra de Gescartera, lo que, a su entender, permitiría "un sistema de retroacción de los fondos para ver a dónde ha ido el dinero" y si los fondos que se sacaron en los últimos tiempos se recuperaron lícitamente.

A su juicio, lo que ha sucedido en Gescartera es que se estuvovaciando de fondos la agencia durante mucho tiempo y especialmente en los dos últimos años. Por ello, piden la quiebra de la sociedad, "porque la intervención ya no es suficiente y hay que liquidar la empresa".

(SERVIMEDIA)
11 Oct 2001
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