El primer encuentro tuvo lugar en Barcelona con la participación de los consejeros de Economía de la Generalitat y de la Junta de Andalucía. El Gobierno andaluz defiende que la financiación sanitaria debe ajustarse a un criterio que reconozca el censo actualizado de la población de la comunidad autónoma, en lugar de tener en cuenta la participación autonómica en el PIB nacional.

Ambas administraciones reclaman un incremento de los fondos que garantizan la cobertura sanitaria de las comnidades con competencias transferidas para cubrir así su déficit. Tanto Arboleya como Rius, que almorzaron juntos tras la reunión, señalaron que es factible que Junta y Generalitat alcancen una postura común, aunque precisaron que todavía no hay ninguna propuesta concreta.

La Junta de Andalucía considera "irrenunciable" que el modelo asuma como criterio principal el poblacional. Según sus cálculos, eso supondría una aportación del Estado a Andalucía de 700.000 millones en 1998, frente a los 625.000 qu ha recibido este año.