Concretamente, propone modificaciones en los artículos 448, 455, 707 y 713, que hacen referencia a los careos con testigos menores de edad y que fueron introducidos en la Ley de Enjuiciamiento criminal en 1999.

Ante el caso que se está juzgando estos días en la Audiencia Provincial de Barcelona, la Generalitat señala que se ha demostrado que aquellas modificaciones resultan hoy insuficentes para conseguir aminorar las consecuencias que puede tener el desarrollo del proceso penal sobre las víctimas de los delitos menores de edad.

"La confrontación visual y el careo siempre es dolorosa y perjudicial para la persona menor, pero, mucho más en un caso de una víctima menor de una agresión sexual y su presunto agresor", señala el Gobierno catalán en una nota.