El nuevo precio máximo de la gasolina "súper" es de 90,3 pesetas, treinta céntimos menos que ahora. Los precios de las gasolinas normal y sin plomo bajan veinte céntimos y se sitúan en 87 y 88,1 pesetas, respectivamente.

En cuanto al gasóleo, sube 1,6 pesetas el de automoción y se coloca en 70,7. El de calefacción se encarece 1,7 pesetas y pasará a costar 44,9 pesetas para las ventas en surtidor y 42,1 para las compras a granel en partidas de más de 3.500 litros. Fuentes de la Administración consultadas por Servimedia indicaron que, con estas nuevas tarifas máximas, lo más probable es que los precios de venta al público permanezcan invariables en el caso de las gasolinas y suban 1 peseta para los gasóleos.

Las mismas fuentes indicaron que eso es lo que hizo Campsa en la anterior fijación de precios máximos, cuyas variaciones fueron muy similares a las de los autorizadas hoy.