El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentacion, Miguel Arias Cañete, afirmó ayer que los acuerdos firmados por la mayoría de agricultores y pescadores están "cerrados" y no se modificarán, a pesar de "pequeños disidentes" que no los han respaldado.

El titular de Agricultura se refería a la posición de las cofradías de pescadores que no dan por bueno el acuerdo y de la organización agraria Coag, que tampoco ha firmado las ayudas al campo.

En consecuencia, el Gobierno dará hoy el visto bueno a las ayudas para los agricultores, por un valor aroximado de unos 52.000 millones de pesetas, y para los pescadores, por unos 17.000 millones.

En el caso de los agricultores, la medida más destacada es la subida del IVA que repercuten en sus productos en un 3% (un 2% para los ganaderos), lo que les permitirá con inmediatez mejorar sus ingresos hasta en unos 42.500 millones de pesetas.

Por lo demás, se mejoran los sistemas de cotización por módulos para permitir la deducción de hasta un 35% del gasóleo utilizado, se ofrecen incentivos fiscales pra I+D y renovación de maquinaria y se habilitan 35.000 millones de pesetas para créditos "blandos". Además, las cooperativas agrarias acceden a vender gasóleo a terceros no socios.

En cuanto a los pescadores, han logrado un rebaja durante los próximos cuatro meses de las cuotas que abonan a la Seguridad Social (tanto trabajadores como empresarios), que se verán rebajadas hasta un 65% con cargo a un préstamo concedido por el Tesoro Público.

Además, se aplazará el pago de tributos y se intentará ua mejora en la gestión y dotación de las cofradías. También accederán a créditos blandos por valor de unos 7.000 millones de pesetas.

En ambos casos, el Gobierno y los firmantes abrirán mesas de debate para tratar asuntos como la posibilidad de instaurar un gasóleo profesional, mejorar la competitividad de las explotaciones y reformar los regímenes de la Seguridad Social de ambos colectivos.