Como consecuencia de este duro encarecimieto, el precio máximo de la 'súper' pasa a situarse en las 117,6 pesetas por litro, mientras que la 'sin plomo' queda en un 'tope' de 111,4 pesetas por litro.

Este incremento se verá parcialmente compensado en la factura global del consumo de carburantes, por el descenso paralelo de 1,1 pesetas por litro que se operará la próxima semana en el precio de los gasóleos.

Dicha rebaja, según los operadores petroleros consultados por Servimedia, aún no puede achacarse a un punto de inflexión en el encareimiento que venía sufriendo los carburantes desde hace más de un mes, en primer lugar porque las gasolinas no confirman dicha tendencia y en segundo término, porque habría que esperar a ver si la semana que viene se ratifica dicho abaratamiento sin contar con el efecto climatológico que hace descender la demanda del tipo C.

En concreto, la rebaja generalizada de los gasóleos situará el precio del de automoción, tipo A, 91,9 pesetas por litro, mientras que el B se situará en 56,4 y el C o de calefacció en 54,2, para las adquisiciones realizadas directamente en estaciones de servicio.

Aunque la rebaja es la misma, las compras a granel -entre 2.000 y 5.000 litro- de gasóleo C pasan a costar 51,3 pesetas por litro.