"La decisión de la Comisión Europea da la razón a Gas Natural, que ha mantenido desde el principio que, según la normativa europea actual vigente, la facturación de Endesa en España es superior a los dos tercios del total, según sus cuentas del ejercicio 2004, formuladas por su Consejo de Administración, auditadas, aprobadas por su Junta General de Accionistas y depositadas en los registros públicos", señaló la gasista en una nota de prensa.

Por otra parte, "la Comisión Europea ha realizado un detallado análisis de los ajustes contables presentados por los actuales gestores de Endesa ante el organismo de Competencia europeo, y ha puesto de manifiesto que estas nuevas cuentas carecían de soporte técnico y que, en muchos supuestos, constituían interpretaciones sesgadas e interesadas de las normas contables y del reglamento comunitario de concentraciones".

Para Gas Natural, la decisión de Bruselas constituye un "serio correctivo" para los actuales gestores de Endesa, que han visto como sus propuestas de ajustes han quedado en entredicho tras el análisis de la Comisión.

En opinión de Gas Natural, "como ningún interés había en ello para el accionista de Endesa, ésta sólo buscaba dilatar la tramitación del proceso y evitar de cualquier manera posible que sus accionistas puedan llegar a decidir sobre la OPA".

LLAMAMIENTO La compañía gasista apela a la responsabilidad, al sentido común y a los criterios de Buen Gobierno de los actuales gestores de Endesa "para que devuelvan a la operación el carácter empresarial que siempre ha debido mantener".

Para Gas Natural, este empeño de los gestores de Endesa por descalificar y recurrir cualquier decisión tomada por un organismo oficial al respecto de la operación, es contrario a los intereses de los accionistas de Endesa, ante los que además deberán explicar y justificar los gastos en los que están incurriendo, desde el punto de vista económico y también en recursos humanos, para materializar la defensa "con uñas y dientes" que anunciaron desde el principio.

Gas Natural confía en la objetividad y profesionalidad de las autoridades de competencia españolas y está convencida de que se culminará con éxito la autorización de la operación, ya que la compañía considera que los términos de la oferta cumplen con la normativa vigente y no atentan contra la competencia. Asimismo, la compañía gasista recuerda que este proceso está en línea con otros movimientos similares que se están produciendo en Europa y que permitirá crear empresas integradas en la gestión de gas y electricidad, y con fuerte compromiso de inversión con el objetivo de reforzar los niveles de calidad de servicio y seguridad de suministro para todos los consumidores.