Gallardón dijo en la inmediaciones del Estadio de La Peineta que los etarras "buscaban un simbolismo" al atentar contra la que sería sede principal de los Juegos Olímpicos en caso de lograrse su celebración en la capital.

El regidor madrileño manifestó que actos como éste sólo producen repugnancia desde el punto de vista cívico y moral y los terroristas vuelven a enarbolar de nuevo un lenguaje que únicamente produce "hastío y asco".

Gallardón hizo un llamamiento a los madrileños para que estén más unidos que nunca y desarrollen una "entidad clara de nuestros valores frente a una minoría de individuos aislados que no van a truncar nuestros proyectos ni nuestras ilusiones".