El pasado día 21, Garzón solicitó a la Sala Tercera de lo Penal que reara el sumario por el asesinato de García Goena por parte de los GAL, al considerar que las investigaciones en marcha sobre la financiación de esa banda terrorista puede ayudar a determinar la autoría del atentado.

El pasado mes de abril, Garzón había rechazado la personación del abogado de Pilar Martín, Juan María Bandrés, como acusación particular en el sumario de los Gal, por entender que no había "nuevos datos" del asesinato de García Goena sobre los ya conocidos en el primer juicio por el 'caso Ga' en 1991.

Martín Garrido señaló que se retracta de las declaraciones en las que señalaba que se sentía "traicionada" por el juez Garzón, cuando éste rechazó la personación de Bandrés en el sumario de los Gal.

"Es un juez y tiene que ir averiguando las cosas. No puedo pretender que sea un mago. Nunca he ido en contra de él, ni he querido hacerle daño, le tengo muchísimo respeto, confió muchísimo en él y le doy muchísimos ánimos", dijo. "Dije aquello en un estado anímico malo, en un momento de dessparación y de impaciencia".

Pilar Martín, que se mostró esperanzada en que la Sala Tercera de lo Penal reabra finalmente el 'caso García Goena' y en que los responsables del atentado contra su esposo sean castigados algún día, declaró que la justicia española le debe "el esclarecimiento de los hechos y un investigación a fondo". Manifestó su certeza de que, detrás de la muerte de su marido, están los ex policías José Amedo y Michel Domínguez, lo que no significa que crea que ellos fueron los autores ateriales del atentado.

La viuda de García Goena explicó que su "certeza moral" se basa en las declaraciones de la ex amante de José Amedo, Inmaculada García, quien desveló que los ex policías llevaron un paquete a su domicilio, supuestamente con explosivos. "Pienso que no mentía. ¿Qué interés tenía esa señora para mentir?", se preguntó.

OCHO AÑOS DE ESPERA

Martín Garrido señaló que lleva ocho años esperando que alguien le explique por qué y quién mató a su marido, porque no entiende que asesinran a alguien que no tenía nada que ver con banda terrorista alguna, que era pacifista, y "que no podía soportar coger un arma ni siquiera para hacer un simulacro", razón por la cual se negó ha cumplir el Servicio Militar.

"Yo quiero que Amedo cuente a quién le dió la orden para poner la bomba. Necesito saber quién lo planificó", dijo.

La viuda de García Goena rechazó que el asesinato de su marido fuese un error, dadas las declaraciones de Inmaculada García, quien aseguró que los ex policías planaban atentar contra alguien que no tuviera nada que ver con la banda terrorista ETA para que sus superiores les hiciesen caso.

Aseguró que se siente "desencantada" con el Gobierno español, ya que, a su juicio, obstruye el trabajo de la justicia guardando silencio y "echando tierra sobre todos los casos".

Añadió que también se siente "desamparada" por el Ejecutivo, ya que le han negado una indemnización por la muerte en atentado de su marido, con el argumento de que no se conoce la verdadera naturleza de los Gal y que su esposo murió en Francia, y no en España.