A las 11 de la mañana se reunieron los magistrados por primera vez desde que se hizo pública la sentencia. En el orden del día estaba previsto resolver las aclaraciones pedidas por todas las defensas -un recurso puramente de trámite- y debatir si los condenados deben ya entrar en prisión o esperar a que el Tribunal Constitucional decida sobre sus respectivos recursos de amparo.

Después de 4 horas de reunión, sobe las 15,00 horas de la tarde los jueces abandonaron el Supremo con la intención de regresar esta tarde para seguir con el debate. Todo apunta a que la polémica surgió en el tema de la posibilidad de ordenar ya la entrada en prisión.

En este sentido, lo más probable es que la Sala de lo Penal pida opinión al fiscal antes de tomar una decisión definitiva. Esto haría que la entrada de los condenados en prisión, en caso de que se produzca, se traslade a una fecha posterior al 15 de septiembre, día en el ue el Rey procede a inaugurar el año judicial, precisamente en la sede del Tribunal Supremo.

A su salida de la reunión de la mañana, los magistrados declinaron realizar cualquier valoración, si bien confiaron en que la reunión de la tarde no se alargue en exceso. De hecho parece que el debate está muy avanzado y esta tarde podría conocerse con bastante precisión la fecha en la que los condenados deben entrar en prisión.