En declaraciones a Servimedia, Romero salía así al paso de las declaraciones del ex presidente del Gobierno Felipe González y el ex ministro del Interior José Barrionuevo, implicado en el proceso, quienes lo tacharon de "juicio político".

"No sé que carácter político puede tener un secuestro en un caserío de Cantabria, no se si políticamente en la democracia se entierra a la gente en cal viva", comentó Romero.

Respecto a los reproches de González al gobierno del PP por no haber impedido este proceso, el coordinador de IU se preguntó si lo que ha querido decir el ex presidente es "que si él hubiera continuado en el Ejecuivo no hubiera permitido el juicio, torciendo la voluntad de la judicatura y cargándose la separación de poderes".

Tal y como ya ha advertido el que fuera secretario de Estado para la Seguridad Rafael Vera, también imputado en el juicio, Romero reconoció la posibilidad de que haya "sorpresas" durante el proceso, ya que en el banquillo se sientan antiguos miembros del aparato del Estado que pueden poseer información para dar "un golpe de efecto".

Sin embargo, "ninguna sorpresa es tan grande como l que se llevó Segundo Marey" al ser secuestrado, replicó al tiempo que celebró el "triunfo del Estado de Derecho" por el inicio del proceso después de que se haya hecho "todo lo posible por evitarlo".

Tras recordar que algunos de los encausados "han reconocido su participación en los hechos", consideró que la celebración del preceso puede beneficiar al PSOE, al que vendrá "muy bien inaugurar una nueva etapa depurando responsabilidades".

Finalmente, recomendó a los socialistas que no hagan "patrioismo de partido" con el proceso porque se juzga a determinados miembros de su formación "pero no las ideas socialistas ni lo que el PSOE significa".