La actitud del PP, que fue duramente censurada por el resto de los partidos, obliga a que el debate sobre la petición de IU, PNV y Grupo Mixto se posponga a la próxima sesión plenaria del día 19 de octubre.

La portavoz adjunta del Grupo Popular, Loyola de Palacio, aseguró en rueda de prensa que el PP se opone a juntar las dos iniciativas porque la de los otros grupos exige que se investigue Intxaurrondo, algo para lo que no está capacitado el Parlamento.

"En el Congreso debemos invstigar responsabilidades políticas, y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado son responsables penal y administrativamente, pero no políticamente", afirmó De Palacio.

La portavoz de Izquierda Unida, Rosa Aguilar, valoró en términos muy duros la actitud del principal partido de la oposición. En su opinión, tras la postura sin precedentes del PP de impedir que se debatan dos peticiones similares se esconde un claro deseo de que el Parlamento no investigue ni Intxaurrondo ni tampoco los GAL.

Sgún reveló Aguilar, el PP no se limita sólo a vetar el debate esta semana de una comisión sobre Intxaurrondo, sino que está haciendo "gestiones" secretas con algunos grupos de la oposición para que ni siquiera se apruebe la comisión GAL, aunque ellos mismos lo pidan públicamente.

Joaquim Molins, de CiU, lamentó la postura insólita en el Parlamento del PP, pero aseguró que su grupo no ha recibido ninguna insinuación de los populares para que no voten a favor de la comisión GAL, tal y como asegura Izquirda Unida.

Para Joaquín Almunia, portavoz del PSOE, la estrategia adoptada hoy por el PP contra la petición de IU, PNV y Grupo Mixto le causa "sonrojo", porque demuestra que los populares no quieren esclarecer la verdad del "caso GAL", sino "instrumentalizar" una iniciativa parlamentaria para obtener réditos electorales "jugando con cuestiones que tienen que ver con la política antiterrorista".