Para el secretario general de ERC, Angel Colom, Felipe González demostró, en una intervención "poco creíble", su "nerviosismo y prepotencia".

A su juicio, el Ejecutivo socialista está viviendo "su mayor crisis política", dado que "estamos hablando de terrorismo de Estado". Colom añadió que "el hedor de las cloacas ha llegado finalmente al despacho de Felie González".

Esquerra Republicana considera, según su líder, que en estos momentos "no se pueden mantener las mismas personas al frente del Gobierno" tras el caso de los GAL, aunque esta formación descarta las elecciones generales anticipadas porque "el pacto PSOE-CiU medio garantiza determinada posición de estabilidad".

Por su parte, el presidente de Iniciativa per Catalunya (IC), Rafael Ribó, criticó que González eludiese en la entrevista cualquier responsabilidad por la trama GAL y el hecho deque únicamente se haya referido a esta cuestión una vez iniciada la acción judicial.

En opinión de Ribó, "es grave que un gobierno eluda todo el campo de las responsabilidades políticas y nos quieran hacer creer que el GAL es un invento de cuatro vengativos sin relación con el aparato del Gobierno".

El líder de IC señaló que el presidente del Gobierno se mostró anoche "contundente pero nervioso" e "incapaz de sumar credibilidad y autoridad", y advirtió que la entrevista no puede convertirse en "scedáneo de su comparecencia ante el Parlamento".

El presidente del PP de Cataluña, Aleix Vidal-Quadras, calificó de "intento fallido y patético de negar la evidencia" la intervención de González. Según explicó, "cada día que pasa en esta situación, el país sale más perjudicado, y lo que el ciudadano debe preguntarse es por qué Pujol continúa manteniendo a un Gobierno de estas características en perjuicio clarísimo de los intereses de Cataluña y de toda España".