Murillo manifestó su "dolor" por no haber sido atendida la demanda de prescripción de delitos y expresó su satisfacción por "saber que la justicia parece que empieza a ser igual para todos y que el relato de hechos probados que recoge la sentencia es la auténtica verdad".

Refiriéndose al intento de declinar responsabildades por parte de Barrionuevo y Vera, declaró que "constituye un acto de malnacidos el tratar de echar en los policías y en los cuerpos de los policías sus propios actos". Murillo añadió que "ahora es el momento de la serenidad, el momento de examinar con precisión la sentencia y estudiar si es oportuno presentar algún recurso ante el Tribunal Constitucional".

Por último, Murillo expresó "desde el dolor que le produce a un abogado que condenen a un cliente" que acata y respeta la sentencia completamente y que, pasados quince años, "cuando la razón que tiene la pena carezca de sentido", acudirá al presiente del Gobierno y a su Majestad el Rey para pedir la medida degracia del indulto.