Garzón aseguró hoy que "no hay nada que ocultar". En declaraciones a la COPE, el juez señaló que no sólo ha recibido a Domínguez tres veces, sino "tantas veces como lo ha solicitado". En Onda Cero apuntó que habrán superado la quincena de veces.

"Está registado las veces que han entrado en la Audiencia Nacional, se ha hecho a la vista de todo el mundo y siempre en mi despacho oficial, como justiciable que es, y cada vez que me pida que quiere hablar conmigo y siga teniendo asuntos en mi juzgado ese señor, y cualquier otro, va a ser recibido", indicó el magistrado.

El juez sobre el que ha descansado la mayor parte de la instrucción del 'caso GAL' también fue entrevistado en Onda Cero, donde señaló que "aquí parece que el objetivo a investigar soy yo, y nootras cosas".

Garzón dijo sobre las afirmaciones de Domínguez que "ya estoy acostumbrado. No ha sido la primera vez ni será la última, y habrá que aguantar como se está haciendo: firme y cumpliendo la ley".

VA EN EL SUELDO

"Algunos temas no son cómodos para muchas personas y desde luego no me van a dejar en paz", apuntó el magistrado. "Ya me han investigado el patrimonio, me han entrado en la casa, me han acusado de las mayores tropelías... pues bueno, aquí estamos". Garzón añadió que "hay cosa que yo digo que van en el sueldo. Esta es una más".

Preguntado si revelaría al juez Eduardo Móner, que instruye el 'caso GAL' en el Tribunal Supremo, el contenido de las conversaciones con Domínguez, Garzón afirmó: "Esto no tiene ni pies ni cabeza. Los que saben derecho procesal y los que conocemos el mundo del derecho saben perfectamente que esto es un absoluto disparate, pero, en fín, aquí estamos para lo que sea menester".

El magistrado de la Audiencia Nacional recordó que habrá superado "los800 ó 900" encarcelamientos de miembros de ETA. "En concreto, ésta última, Nagore Múgica, los dos procedimientos por los que se le reclama la extradición son procedimientos míos y está procesada en ellos. A lo mejor este dato no interesa que salga con frecuencia en la prensa, pero los jueces tampoco estamos para que nos feliciten", manifestó.

Garzón calificó de "ceremonia de confusión absoluta" las declaraciones de Michel Domínguez. Señaló a la COPE que "yo no le puedo poner una pistola a un señor en l pecho para que declare". Reconoció que "no se aguanta bien esta presión. Lo que pasa es que tengo las espaldas muy anchas y mi padre me enseñó a aguantar".