Durante la vista de los recursos de apelación presentados por la defensa de los tres procesados contra su mantenimiento en prisión, celebrada hoy por la sección segunda de la Sala de lo Penal, el fiscal argumentó que persiste el riesgo de que puedan eludir la acción de la justicia que, a su juicio, todavía es mayor en la actualidad dado que ahora eisten más indicios de criminalidad contra ellos.

La postura del fiscal fue apoyada por la acción popular, mientras que el defensor de los tres procesados, el abogado Jorge Argote, negó que tanto Elgorriaga, Dorado y Bayo vayan a huir si son excarcelados.

Respecto a Elgorriaga, restó importancia al informe policial que alertó al juzgado de la posibilidad de que éste pudiera fugarse, mientras que en el caso de los dos ex agentes de Intxaurrondo, destacó que sus familiares viven de las pensiones queéstos perciben por lo que si huyesen, se quedarían sin ellas.

Por otra parte, Argote también aprovechó su intervención ante la sala para descalificar a los principales testigos de cargo que existen contra sus clientes.

Elgorriaga permanece en la cárcel de Soto del Real (Madrid) desde el pasado 19 de junio, en que el juez Javier Gómez de Liaño dictó contra él un auto de prisión por su supuesta implicación en el secuestro, torturas y asesinato de los presuntos etarras José Antonio Lasa y José Ignaco Zabala.

Además, el magistrado le procesó como autor de dos delitos de detención ilegal, autor por cooperación necesaria de dos delitos de tortura y autor por omisión de dos delitos de asesinato.

Por su parte, Bayo y Dorado Villalobos ingresaron en prisión el pasado 23 de mayo, también por orden de Gómez de Liaño, que les procesó como autores materiales del secuestro, torturas y asesinatos de Lasa y Zabala.

La misma sala que deberá resolver estas apelaciones ya rechazó con anterioridad excacelar a Elgorriaga, Dorado y Bayo, los únicos procesados del 'caso Lasa y Zabala' que permanecen en prisión, al considerar que existía el riesgo de que eludieran la acción de la justicia si eran puestos en libertad, teniendo en cuenta la gravedad de los delitos de los que están acusados y las penas que conllevan.