Durante su interrogatorio en el Tribunal Supremo en relación con el "caso Marey", Hernández subrayo que, en contra de lo que se juzga en el Alto Tribunal, durante el tiempo en el que José Barrionuevo y Rafael Vera estaban al frente de Interior, "existía una preocupación obsesiva en ese ministerio por la legalidad".

Añadió ue mientras él ocupó la Fiscalía General del Estado "existió una voluntad política de someter al Ministerio del Interior a la más extricta legalidad, e incluso al visto bueno de la propia Fiscalía", y que, sobre todo en asuntos de terrorismo, "Interior estaba al servicio de la Audiencia Nacional y de las decisiones judiciales".

Sobre el "caso Marey", Hernández relató que los fiscales de la Audiencia Nacional José Aranda e Ignacio Gordillo le visitaron el 15 de julio 1993 para recordarle que ese sumari iba a prescribir, si bien, según aseguró, nunca hasta esa fecha había oído hablar de ese caso, del que ha surgido el juicio que ahora se celebra en el Supremo.

Finalmente, relató que en su etapa en la Fiscalía se había redactado, ante la falta de normativa sobre el uso de fondos reservados, un informe para el control y manejo de estas partidas ocultas.

Manuel Cobo del Rosal, abogado de Rafael Vera, quien se enfrenta a una acusación por un delito de malversación de fondos públicos, solicitó a la ala que este escrito fuera incorporado a la causa, lo que fue rechazado por el Alto Tribunal.