Murillo que realizó estas declaraciones en los pasillos del TS, mientras sigue la comparecencia de Domínguez, señaló que el ex policía sólo quería declarar formalmente ante Garzón en condiciones tales, "que el juez no podía acceder porque no estaba ni en su mano concederlas".

Agregó que Domínguez buscaba "una exculpación que no podía darle el juez". Asimismo el letrado señaló que en las entrevistas que mantuvo el ex policía con el juez de la Audiencia Nacional "no hubo coacción alguna".

Las expectativasque se habían levantado "son falsas", según Murillo. El abogado comentó que en el tramo de la comparecencia de Domínguez ante Móner en la que estuvo presente "se suscitó un debate sobre la corrección procesal en la actuación de Garzón", que hasta el momento no había ningún motivo para pensar que ésta había sido irregular, y que parece que se trata de "una falsa expectativa".