Ardanza dijo que está "anonadado" ante un crimen "tan espeluznante", que le recuerda "una película de terror", y añadió que la sorpresa es todavía mayor si se tiene en cuenta que ests hechos se han producido "en democracia, en un Estado de derecho y en plena euforia de un gobierno socialista que había ganado las elecciones por mayoría absoluta poco antes".

"Es tremendo comprobar a qué nivel se llegó en aquellos momentos", añadió, "y además, según parece evidente, todo ello apoyado o financiado desde algunas instituciones y con presupuestos públicos".

El 'lehendakari' coincidió con el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, al criticar la actitud que mantiene HB cuando las víctias pertenecen a su entorno.

"Si alguien no tiene legitimidad para aprovecharse de estas circunstancias son quienes tampoco respetan los derechos humanos ni practican la democracia", afirmó, "y me refiero a la otra parte, que también practica la violencia y no respeta la voluntad mayoritaria".