Galán, en declaraciones a Servimedia, señaló que lo ositivo de esta decisión "es que significa que la solución final va a ser revisable por la Sala Segunda del Supremo y que el titular de la misma e instructor no va a tener la única palabra ni la última".

Por el contrario, lamentó que el aplazamiento supone una "dilación y un precedente dilatorio en la instrucción de la causa". En este sentido agregó que la decisión del Supremo es "técnicamente más correcta, aunque con el inconveniente de que produce graves dilaciones".

La acción popular solicitó n su día al juez Móner que citara a declarar como imputados a Felipe González, al ex vicepresidente del Gobierno Narcís Serra, y al dirigente socialista Txiqui Benegas.