En su opinión, el proceso de adhesión de los países candidatos sólo se completará cuando se tenga la certeza de que las consecuencias de la llegada de estos Estados, tanto desde el punto de vista social como económico, "son controlables".

Así lo ha declarado el que será, a partir de ahora, encargado de Ampliación del Ejecutivo comunitario. "Si es previsible que la entrada de distintos países se convierte en un "mata-empleos" para Alemania o para otros Estados de la Unión, entonces habrá que acordar unos determinados plazos, indicó.

Verheugen ha hecho hincapié en que la ampliación sólo se puede llevar a cabo con la aprobación del pueblo de cada uno de los actuales Estados miembros, y que no se podrá obligar a los ciudadanos europeos a ceptar estas nuevas adhesiones si se tiene la impresión de que esto tiene más inconvenientes que ventajas para ellos.

De cualquier forma, Günter Verheugen está convencido de que "la Unión Europea del año 2020 contará con unos 25 ó 30 Estados miembros", es decir, el doble de los actuales.