Por su parte, el Lahn Dill alemán ganó la competición por tercer año consecutivo gracias a la actuación estelar del canadiense Patrick Anderson, considerado el mejor jugador del mundo en el "deporte rey" de las disciplinas paralímpicas.

Con este resultado, el conjunto español, que ganó la Copa de Europa celebrada en Sheffield (Gran Bretaña) en 1997, repite el cuarto puesto logrado en Giulianova (Italia) en 2001 y en Sevilla en 2002, y se mantiene entre los mejores clubes del continente por undécima vez en los 12 últimos años, cifra no alcanzada por ningún otro equipo.

Después de perder ayer en las semifinales contra el Lahn Dill por 58-74, el Fundosa ONCE se enfrentó al Tabu Cantu italiano, en el encuentro que decidía el tercer y el cuarto puesto de la máxima competición continental de clubes de baloncesto en silla de ruedas.

El partido, disputado en el Complejo Cultural y Deportivo Akatlar de la capital turca, comenzó sin un dominio claro de ninguna de las dos escuadras, de manera que el primer cuarto concluyó con un ajustado 13-14 favorable a los transalpinos.

Después, el Fundosa ONCE logró una pequeña renta de cuatro puntos de ventaja (18-14, minuto 13), pero fue anulada por los italianos gracias a la entrada en la cancha del pívot internacional Matteo Cavagnini, que adelantó a su equipo en el marcador con varias acciones interiores.

De esta forma, el Tabu Cantu llegó al descanso con la máxima ventaja del partido (23-31). Los madrileños sólo lograron anotar cuatro de los 20 tiros de campo intentados en el segundo cuarto.

El entrenador del Fundosa ONCE, Javier Pérez, reestructuró el equipo en el tercer periodo y puso en el parqué a los bases Rafael Muiño y Pepe Cobos.

Cavagnini, uno de los mejores jugadores italianos, acumuló su cuarta falta personal y tuvo que sentarse en el banquillo en el minuto 26, momento en el que los españoles iniciaron su remontada.

Con 37-47 a la conclusión del tercer cuarto, se inició un último periodo en el que el Fundosa ONCE fue limando paulatinamente la desventaja en el marcador. Con una defensa más adelantada y gracias a las canasta de Cobos, que rompía la defensa italiana con varias canastas interiores, el conjunto español entró en el último minuto con sólo seis puntos de desventaja en el marcador (55-60).

Al final, el Fundosa ONCE cayó por sólo un punto de diferencia (61-62) y habiendo tenido el estadounidense Joshua Turek la oportunidad de igualar la contienda o de dar la victoria al conjunto español con un lanzamiento triple.

El propio Turek fue el máximo anotador del encuentro, con 19 puntos, secundado por sus compañeros Cobos, con 12 tantos, y Juan Carlos Gavira (11 puntos y 16 rebotes), en tanto que en el Tabu Cantu destacaron el pívot británico Simon Munn (13 puntos y 14 rebotes) y Galliano Marchioni, también con 13 tantos.

En el partido de la final, el Lahn Dill se impuso al Anmic Sassari italiano por 75-43, con una gran actuación del canadiense Patrick Anderson, quien anotó 33 puntos, capturó 17 rebotes y repartió seis asistencias.