La fundación explicó en un comunicado que esta iniciativa se enmarca en su propósito de contribuir a la mejora de las condiciones de vida de los colectivos sociales más desprotegidos mediante el desarrollo de aplicaciones sociales y sanitarias haciendo uso de las telecomunicaciones.

El alcance de la convocatoria es el conjunto de entidades que de forma acreditada carezcan de ánimo de lucro y que dispongan de un serviio organizado para la atención social a personas a través del teléfono.

Los servicios telefónicos de las entidades aspirantes deben prestar atención de forma individualizada y gratuita a aquellas personas con necesidades de información y ayuda. También han de disponer como mínimo de una línea telefónica de atención al público específica para este uso atendida con un horario regular.

Las ayudas se destinarán a mejorar el equipamiento e infraestructuras del servicio telefónico mediante el apoyo a poyectos de modernización.

El pasado año, la fundación otorgó ayudas a 140 de los 255 proyectos presentados. Las comunidades autónomas en las que se beneficiaron más asociaciones fueron Andalucía, Cataluña y Madrid.