Según informó hoy la citada fundación, los premios de este concurso, en el que han participado alumnos de segundo de bachillerato, se fallarán el próximo 29 de noviembre y consisten en un ordenador portátil para el estudiante ganador y otro para el tutor del trabajo.

Entre las propuestas finalistas presentadas por los adolescentes, figura "¿Puedo pasar?", un trabajo en el que dos alumnos hablan de la construcción de viviendas adaptadas y diseñadas con sistemas domóticos.

La adaptación de los centros de estudios para facilitar la movilidad de los estudiantes con discapacidad es otro de los aspectos escogidos por los alumnos en el trabajo titulado "La accesibilidad en los centros educativos. La conciencia ciudadana".

Otro alumno formula y realiza la adaptación de su centro de estudios, edificio que cuenta con numerosas escaleras, aportando los planos para la modificación.

La experiencia familiar de una niña con espina bífida, desde su escolarización hasta el bachillerato, constituye un relato en primera persona, de todo el proceso bajo el lema "Todos somos iguales".

Otros dos trabajos seleccionados se refieren la sordera, uno de ellos titulado "Los sonidos del silencio", en el que se hace una aproximación desde la no discapacidad al mundo de las personas sordas. El otro se fija en el soporte y la ayuda logopédica hacia estas personas.

La mayoría de los trabajos destacan la importancia del contacto humano y de la comprensión social para destruir las barreras de la incomprensión y el olvido.

"Los chicos y las chicas de 2º de bachillerato han demostrado una fina sensibilidad social y una notable capacidad de trabajo para aproximarse al mundo de las personas discapacitadas", finalizó la Fundación Salas.