FUNCIONARIOS. EL GOBIERNO ACUSA A LA AUDIENCIA DE ROMPER LAS REGLAS DE LA SEPARACION DE PODERES

MADRID
SERVIMEDIA

El vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, arremetió hoy contra la sentencia de la Audiencia Nacional que anula la congelación salarial de los funcionarios en el año 1997 y aseguró que el Ejecutivo la recurrirá porque rompe las reglas del juego de separación de poderes que dee regir un Estado de Derecho.

En rueda de prensa, Rajoy afirmó que una sentencia como la dictada por la Audiencia impediría a cualquier gobierno la realización de su política económica y, además, priva a las Cortes Generales de la facultad de aprobar la Ley de Presupuestos Generales del Estado.

Siguiendo la pauta fijada por esa sentencia, explicó, el Gobierno actual podría firmar acuerdos en muchas materias para los próximos 15 años y el Parlamento no podría modificarlos, ni tampoco el futuro Ejeutivo.

"Es una ruptura de las reglas de juego" y supone un "déficit" para el poder legislativo, insistió Rajoy visiblemente enojado, antes de añadir que la sentencia no se refiere sólo a los sueldos de los funcionarios, sino a cualquier compromiso que realice el Gobierno, que no puede ser modificado por las Cortes.

Recordó que la Constitución España otorga precisamente a las Cámaras la capacidad de aprobar los presupuestos y alertó a los partidos de la oposición del riesgo que esta sentencia supoe, puesto que no podrán controlar al Gobierno en el Parlamento, ya que el Ejecutivo podrá cerrar acuerdos que luego no se someterán a la disciplina del legislativo.

TREMENDO

Rajoy aseguró que "no hay país en el mundo" donde se haya dado un caso similar, por lo que recurrirán "en defensa de la separación de poderes". "Vamos a recurrir en casación y agotaremos todas las posibilidades legales a nuestro alcance", dijo.

"Esta sentencia no tiene sentido; es un caso tremendo de ruptura de reglas; nunc había visto una cosa igual y son muchos lo que nunca habían visto una cosa igual", reiteró el vicepresidente del Gobierno, antes de asegurar que, por ello, es obligación del Ejecutivo recurrir y alertar a la opinión pública de que esta sentencia priva al Parlamento, representación de la soberanía nacional, de actuar conforme a lo establece la Constitución.

Finalmente, puso como ejemplo que un Gobierno en minoría podría pactar acuerdos con los agentes sociales o con otros sectores, y el Parlamento no odría evitarlo porque ahora "los presupuestos los aprueban el Gobierno y los sindicatos, no ya las Cortes", bromeó.

El recurso será presentado por el Gobierno ante la misma sala de la Audiencia Nacional que ha dictado la sentencia, a pesar de que se niega la posibilidad de recurso, según precisó Rajoy.

Actualmente, los servicios jurídicos del Ministerio de Justicia trabajan en la elaboración del recurso, que girará sobre el planteamiento de un conflicto entre el Parlamento y el Poder Judicial.

Sobre los efectos económicos de la sentencia, Rajoy aseguró que no es una buena noticia para la consecución del equilibrio presupuestario previsto para el 2001, aunque confió en que "vencerá el sentido común".

Finalmente, no quiso pronunciarse sobre la apertura de una negociación urgente con los funcionarios, tal y como establece la sentencia, para debatir el pago de la posible subida salarial de 1997 y los atrasos generados.

(SERVIMEDIA)
24 Ene 2001
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