FRANCISCO VAZQUEZ ALERTA AL PP Y AL PSOE DE QUE LOS NACIONALISTAS PERSIGUEN "UNA SECESION DE ESPAÑA A PLAZOS"
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El alcalde de La Coruña, el socialista Francisco Vázquez, cargó hoy contra los nacionalistas y contra quienes padecen la "ceguera" necesaria para apoyarles o justificarles, y alertó a su partido y al PP de que estas formaciones persiguen "una secesión de España a plazos".
En una conferencia pronunciada en el Club Siglo XXI sobre la "España definida", Vázquez la definió como la que lleva dos mil años de historia común, pero sometida hoy a una permanente reivindicación de los nacionalistas para redefini un nuevo modelo de poder compartido superador del actual, que apenas ha comenzado su andadura.
Se trata, dijo, de una realidad política "marcada por la iniciativa de las ideologías y partidos nacionalistas, minoritarias en el conjunto del pueblo español, pero determinantes a la hora de fijar las prioridades y el ritmo del debate social y político".
"Para ello han contado con el silencio fruto del complejo, con el que en los primeros años de la transición se trató todo lo que tuviera relación conel propio concepto de España, que de una manera absurda se ligó al pasado más inmediato y se consideró reflejo de un nacionalismo, éste sí condenable y repudiable, como era el nacionalismo español", dijo, en un claro reproche a los partidos de ámbito estatal.
A ello se unió, explicó, la falta de mayorías parlamentarias en distintas etapas, que convirtió a las minorías nacionalistas "en elementos determinantes" para el conjunto de España, pudiendo así mantener en el debate sus pretensiones, siempre abirtas.
"Un proceso nunca cerrado, un contencioso permanentemente abierto, donde a una pretensión satisfecha, sucedía inevitablemente una nueva reivindicación, en un camino sin fin, que para mí, como he dicho muchas veces, encierra una secesión de España a plazos".
Es, en su opinión, "un camino de deslealtades, institucionales y constitucionales", de quienes se valen "de cualquier medio, de mutuas complicidades nacidas de silencios y cobardías, o de la ceguera de quienes obstinadamente se empeñan e no ver que más allá de coyunturas políticas, de unos años para acá, nos estamos jugando el futuro de nuestra convivencia y la pervivencia de la propia idea de España".
"IMPUNIDAD ABSOLUTA"
Como prueba, denunció cómo los firmantes de la "Declaración de Barcelona", con apenas el 7,2 por ciento de los votos en el conjunto de España en las últimas elecciones generales, se han aprovechado "de la debilidad o la ceguera de sus adversarios" para lograr una "impunidad absoluta en su discurso político".
Han logrado, así, que lo progresista y democrático sean las reivindicaciones territoriales, y que la defensa de la Constitución y, por extensión, de España, se considere "un valor centralista, antidemocrático y empañado de un sabor nostálgico del franquismo".
"A pesar de su escasa representación política se les regaló la representación exclusiva de la totalidad de los intereses de sus comunidades y, lo que es peor aún, se les ha considerado como factores determinantes en la estabilidad de sus territoros, para cuyo gobierno no podría plantearse ninguna alternativa que no contara con ellos".
Vázquez reconoció un punto de esperanza en la resolución de la grave situación de Euskadi gracias a la iniciativa del secertario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, de suscribir el "Acuerdo por las libertades y contra el terrorismo", a la Ley de Partidos, y a las resoluciones del juez Baltasar Garzón.
Como principal problema de España se refirió a la educación que actualmente reciben los alumnosde Galicia, País Vasco y Cataluña, donde los planes de estudios, dijo, están "mediatizados y dominados por las tesis nacionalistas".
Apelando al informe de 2000 de la Real Academia Española de la Historia, denunció que los alumnos apenas reciben conocimientos sobre la historia común de España y sus estudios se centran en lo acontencido en su comunidad autónoma.
"El proceso educativo, los conflictos lingüísticos emergentes por la marginación del español en las comunidades que tienen otra lengua coficial, son mera expresión de una política que a través de la deformación de la Historia, la exaltación de la lengua propia como un valor identificativo y consiguientemente la consideración del español como algo ajeno y hostil, busca el logro de sus metas finales ideológicas, que no son otras que la alteración del actual marco constitucional y una redifinición de España, totalmente ajena a lo que ha sido nuestro pasado y nuestro devenir", advirtió.
(SERVIMEDIA)
21 Nov 2002
CLC