Fuentes vinculadas a las Fuerzas de Seguridad españolas informaron a Servimedia de que los agentes galos han detectado varias posibles pruebas de este dispositivo, alguna de las cuales podría haber tenido lugar con posterioridad al alto el fuego anunciado por la banda etarra en marzo.

Las fuentes consultadas aseguraron que esta información fue transmitida a las autoridades españolas hace meses, dentro del cauce de comunicación directa que existe entre los ministerios de Interior galo y español.

En concreto, la detección de uno de estos ensayos con la bomba-lapa direccional fue comunicado España coincidiendo con el visto bueno formal dado por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero a la negociación con ETA.

En este sentido, el pasado 29 de junio Zapatero compareció en el Congreso para anunciar que el Ejecutivo iba a intentar mantener contactos con la banda etarra como consecuencia de la declaración de alto el fuego.

En esta comparecencia, el presidente también se refirió a que la democracia no pagará ningún precio político por la paz, al tiempo que añadió que es un "principio irrenunciable" que las cuestiones políticas sólo se resuelven con los legítimos representantes de los ciudadanos.