Según informó hoy la Xunta, Viturro, a través de una carta, ha informado a Fraga de que la tensión en Venezuela disminuirá previsiblemente y que los emigrantes españoles no son objetivo de ninguna de las parts en conflicto.

Igualmente, indica que desde el consulado general se está en contacto con las directivas de todas las hermandades, asociaciones y clubes de españoles, a los que se les aconseja que mantengan la calma y que procuren no exponerse a riesgos.

Fraga ha expresado al embajador en Venezuela la preocupación con la que en Galicia se siguen los acontecimientos que están ocurriendo en ese país latinoamericano y la consternación que causó la muerte de José Manuel Vilas Liñeira, descendiente degallegos, que murió el pasado 1 de marzo a causa de los disparos que recibió durante una manifestación en San Antonio de Los Altos, en el Estado de Miranda.

Fraga pidió al embajador, tanto en nombre de la familia de Vilas como del alcalde de Val do Dubra, localidad de la que el fallecido era oriundo, que le informara sobre las circunstancias en las que se produjo el suceso.

El diplomático le informó de que se ha abierto una investigación y un procedimiento judicial sobre la muerte de Vilas para e esclarecimiento de los hechos y que, para informar sobre su desarrollo, está en contacto con el consejero de Emigración de la Xunta, Aurelio Miras Portugal.