En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su gobierno, Fraga defendió los contactos entre PSOE y PP, y definió como "maniqueos" a quienes descalifican las conversaciones entre Felipe González y José María Aznar.

"Los que quieran oposición, la van a tener. Los que quieran alternativa, ya la tienen Y los que quieran que no haya diálogo, a lo mejor hablan de otra cosa, pero esa no es la política parlamentaria normal", advirtió.

El jefe del Gobierno de Galicia estima que los contactos entre los dos partidos mayoritarios son deseados por gran parte de la opinión pública, por tanto, "nadie podía decir que no a los debates sobre el denominado paquete de iniciativas para el `impulso democrático', donde cada partido habrá de aportar sus propuestas".

Manuel Fraga dijo que espera que esos contactoslleguen a "buen término" y que espera que "en ningún caso habrá escenas de sofá. En realidad nunca las hubo, porque no somos gente que se deje llevar hacia posiciones de esa naturaleza". Insistió en considerar que los contactos entre PSOE y PP son "la esencia misma" de la vida democrática.

Sobre la posibilidad de extender esos contactos al PSG-PSOE, afirmó estar dispuesto a pesar de la amplia mayoría absoluta que logró el pasado 17 de octubre. Estimó, no obstante, que antes deberá aclararse "quienes sn los interlocutores válidos", en alusión a la crisis del PSOE gallego.

Fraga no quiso comentar unas declaraciones de Alfonso Guerra anunciando el retorno de Fraga a la política estatal, porque él sólo habla de "asuntos serios" y añadió "que el señor Guerra se explique en su partido"

Finalmente, el presidente gallego restó importancia al hecho de que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso del portavoz del Bloque Nacionalista Galego, Xosé manuel Beiras, por la suspensión com diputado durante un mes, a final de la pasada legislatura. "El hecho carece de toda relevancia política, porque ya estamos en otro Parlamento", sentenció Fraga.