FORO AMBROSETTI. AZNAR PROPONE MAYOR MOVILIDAD GEOGRAFICA DE LOS TRABAJADORES POR TODA EUROPA

- El presidente se reúne por separado con el israelí Peres y con el consejero del Rey de Marruecos Andre Azoulay

CERNOBBIO (ITALIA)
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, José María Aznar, propuso hoy, ante la `cumbre` de Barcelona que se celebrará el próximo mes de marzo durante el semestre de Presidencia española de la UE, la puesta en marcha de medidas que hagan frente a la recesión económica que se avecina, entre las que destacó las dirigidas a fvorecer una mayor movilidad de los trabajadores por Europa.

En una intervención a puerta cerrada ante el Foro Ambrosetti, que se desarrolla este fin de semana en la localidad de Cernobbio, al norte de Italia, Aznar ha advertido de que, a pesar del crecimiento económico europeo de los últimos años, hay todavía pocos indicios de que la economía haya mejorado "estructuralmente" su comportamiento.

Una economía que tiene como "límite de velocidad" un crecimiento entre el 2 y el 2,5%, ha advertido, se a a tener que enfrentar al final de la década con una población envejecida que va a aumentar los presupuestos públicos en pensiones y en sanidad.

Se puede pensar, argumentó el presidente, que esa visión es excesivamente catastrofista, pero ha recordado que tampoco a principios de los 80 se podía imaginar que el Japón de entonces, que se codeaba económicamente con los EEUU, iba a vivir la crisis de ahora.

"La posibilidad de una esclerosis prolongada" de la economía europea existe, ha dicho el presdente durante su intervención en la sesión de la mañana, sobre perspectivas de la UE, que ha estado presidida por el ex presidente francés Valery Giscard D`Estaing.

El remedio a esta situación, opina José María Aznar, existe y consiste en ahondar en el camino liberalizador aprobado por los Quince en la `cumbre` de Lisboa el año pasado.

Desde esta perspectiva, y con un euro en marcha que será "punto de partida salida y no de llegada" en enero próximo, el jefe del Ejecutivo se ha preguntado qué hacr en la `cumbre` de Barcelona. Y ha propuesto cinco grandes "pilares":

1.- Mejorar los transportes de la UE através de redes transeuropeas que den un claro impulso al ferrocarril como medio de transporte "sostenible" con la conservación medioambiental; y el desarrollo del "cielo único" europeo.

2.- Un "verdadero" mercado interior de la energía con redes europeas de gas y electricidad que permitan mayor competencia entre las distribuidoras.

3.- Un mercado financiero integrado, consecuencia lóica del euro, desarrollando los calendarios que permitan cumplir con la fecha comprometida de 2005, y de 2003 en particular para el mercado de capital-riesgo.

4.- Mayor movilidad geográfica de los trabajadores por toda la UE con "interconexión de oferta y demanda de empleo" en todos los países, y la colaboración de los distintos organismos públicos de empleo.

5.- Y lo último, y "más importante", ha insistido Aznar, la aceleración del reconocimiento mútuo de títulos educativos, mejor enseñanza de diomas, más intercambios de profesores y alumnos, hermanamiento de los centros de enseñanza y creación de una red europea de investigación científica.

PROTAGONISTA DE LA MAÑANA

El jefe del Gobierno español ha sido el protagonista principal de la mañana en este foro que reúne a la flor y nata de la política y las finanzas mundiales. A falta del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que no se ha dejado ver en esta ocasión por el evento (fuentes fubernamentales españolas insistían hoy en que la ena finalmente suspendida entre ambos mandatarios nunca había estado cerrada del todo), Aznar se ha hecho con la atención de la prensa.

A los elogios que le ha dedicado a puerta cerrada, según las misma fuentes, el moderador del debate, el francés Valery Giscard D`estaing, le ha seguido una ronda de reuniones con diferentes personalidades.

Instalado en un recinto acotado del jardín del hotel Villa del Este, frente al lago Como, Aznar ha ido recibiendo ante las cámaras y los periodistas, al primerministro esloveno, Janez Drnovsek, y al ministro de Asuntos Exteriores israelí, Simón Peres.

Este último, minutos antes de reunirse durante media hora con el mandatario español, se ha ratificado en sus palabras de ayer en el sentido de que su país no acepta observadores de la ONU en el conflicto árabe-israelí, de la misma forma que España no los aceptaría para resolver el conflicto vasco.

En el momento de redactar esta información, el presidente español protagoniza una entrevista con el consejerodel Rey de Marruecos, Andre Azoulay, que ha levantado gran expectación entre los enviados especiales españoles dadas las malas relaciones que existen en estos momentos entre los dos países.

(SERVIMEDIA)
08 Sep 2001
G