La testigo afirmó que, de todos los acusados en esta causa, siete ex altos cargos socialistas de Interior, con el que más relación tuvo es con Vera, quien, a su juicio, "fue la prsona más humana con lo de mi separación". Según explicó Cimorra al Tribunal, Vera se trasladó a Pamplona para visitar a la familia Roldán con motivo del fallecimiento de uno de los hijos de éstos.

Preguntada por si en aquel momento tenía conocimiento de los sobresueldos que cobraba su marido, Cimorra respondió que Roldán no le daba explicacines de nada. Asimismo, la defensa de Vera le consultó si, tras su separación, telefoneó a la mujer del ex secretario de Estado para decirle que no se fiaran de Rodán.

Cimorra lo negó y exclamó que la que no se tenía que fiar era ella. Lo que sí dijo es que, en aquel entonces, 1987, mantenía una relación telefónica con la esposa de Vera.

También prestó declaración en la Audicencia Provincial de Madrid el ex delegado del Gobierno en el País Vasco entre 1983 y 1986, Ramón Jaúregui, quien afirmó que "jamás, nunca, percibí, ni escuché, ni pude intuir que hubiera algún tipo de sobresueldo" entre los altos cargos del Ministerio de Interior".

En relación al x ministro de Interior José Barrionuevo y a Rafael Vera, Jáuregui dijo que tiene "una gran concepción de ellos, por su honradez personal". Del también ex minitro José Luis Corcuera dijo que, "aunque no coincidí con él, tengo una inmejorable opinión".

Al respecto de Roldán, que en el mismo periodo fue delegado del Gobierno en Navarra, dijo que "todo lo que él diga es falso de raíz, de la 'a' a la 'z'".

NINGUNA IRREGULARIDAD

Por otro lado, hoy prestaron declaración los peritos citados por la defesa de Rafael Vera, quienes afirmaron que "la Hacienda Pública ha investigado las cuentas de Vera y no ha encontrado ninguna irregularidad". "No hay ingresos que superen el millón de pesetas" y "estamos convencidos de que no se ha ingresado ningún cheque procedente de los fondos reservados", dijeron los peritos.

Sin embargo, el fiscal Alejandro Luzón preguntó a los peritos por el incremento de 23 millones de pesetas registrado por el patrimonio de Vera y de su esposa de 1991 a 1992. Según el fiscal, ladeclaración de la renta conjunta fija una renta disponible de 15 millones. "¿Cómo es posible que con esta renta se produzca un incremento de 23 millones de pesetas?", consultó Luzón a los peritos.

Según ellos, incrementos de patrimonio de este tipo pueden producirse "por otro tipo de haberes que no se tienen por qué declarar, como una indemnización por la muerte de un hijo, como así le sucedió al matrimonio Vera-Esquiva.