La fiscalía solicitó 18 meses de prisión menor para 15 de los jóvenes; 2 años, cuatro meses y un día, para uno de ellos con antecedentes penales por causas de robo; dos meses de arresto menor para cinco y un año de prisión menor para el restante.

Asimismo, solicitó el pago conjunto de 2,5 millones de pesetas por los daños y desperfectos ocasionados en propiedades públicas y privadas.

De las 22 personas juzgadas, cinco de ellas menores de edad en el momento de ser detenidos, dos no se encontaban presentes en la sala de vistas: Manuel Borgogna, para el que se pedía menos de un año de prisión, por lo cual podía estar ausente, y Asier Oyarzabal, que se encuentra en rebeldía.

Once de los doce abogados defensores, se adhirieron a la protesta formulada por uno de los letrados, Iñigo Iruín, en la que se argumentaba la vulneración al derecho de defensa de los acusados al desconocer las acusaciones específicas por las que se inculpaba a cada uno de los jovenes.

Asimismo, se solicitó la nulidd de las actuaciones y un aumento de las pruebas testificales de las defensas. El juez rechazó las dos primeras y aprobó la demanda de nuevos testigos.

Los doce acusados que prestaron declaración a lo largo de la mañana negaron su participación en los hechos argumentando que se encontraban en las inmediaciones del Boulevard, donde se estaban produciendo los incidentes entre la Ertzaintza y grupos de jóvenes, por curiosidad o para pasar a otras zonas de la Parte Vieja.

MALOS TRATOS

Todos ellos dnunciaron haber recibido malos tratos, golpes y patadas en todo el cuerpo, por parte de los agentes que les detuvieron quienes, según los inculpados, no se identificaron como policías en ningún momento, ya que no iban uniformados.

La vista continuará a las 9,30 horas de mañana con el testimonio del resto de los inculpados así como las declaraciones de los ertzainas que llevadon a cabo las detenciones. El juicio se prolongará durante toda la semana.

Los hechos enjuiciados se sitúan en la tarde del14 de agosto de 1.993 tras la tradicional procesión cívico-religiosa de La Salve, cuando grupos de jovenes provocaron diversos incidentes y enfrentamientos con la Ertzaintza. En estos hechos, una cincuentena de personas fueron detenidas, algunas de las cuales ya han sido juzgadas y condenadas.