El juicio, que se celebró en el juzgado de lo penal número cuatro de Palma, quedó visto para sentencia a primera hora de esta tarde. Esta es la primera ocasión en que Berga, procesado por sendos delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad documental, como prinipal inculpado en el escándalo Brokerval-Inverbroker, se sienta en el banquillo de los acusados.

Durante su declaración ante el juez, Berga calificó de "mentiroso" a Bartolomé Seguí Molinero, el denunciante y presunto estafado, de quien aseguró que no le conocía de nada.

Los hechos fueron denunciados en 1994, pocos meses antes de la intervención de la CNMV en Brokerval y después de que Berga extendiera un talón, por un valor de 1.800.000 pesetas, contra una cuenta corriente de la sucursal del Barlays Bank de la que era titular la empresa Broker Gestión Baleares SA, sociedad de la que, además, era apoderado el propio Berga, según el escrito del ministerio fiscal.

No obstante, cuando Moliner quiso hacer efectivo el cobro del citado talón se le comunicó en la entidad financiera que dicha cuenta carecía de fondos.