El fiscal les acusa de un delito de pertenencia a organización terrorista por su vinculación al grupo independentista extremista Resistencia Galega. Además, les imputa un delito de tenencia de explosivos y de conspiración para cometer estragos terroristas.

Por otro lado, Barroso solicitó prisión eludible bajo fianza de 6.000 euros para Adrián Ponte Sande, de 20 años, arrestado horas después de la detención de los otros dos imputados por su presunta relación con los hechos.

Ponte Sande, Sánchez Gorgas y Vigo Domínguez declararon hoy durante más de tres horas ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, quien deberá ahora tomar una decisión sobre la situación de los tres imputados.

Sánchez Gorgas y Vigo Domínguez fueron arrestados por agentes de la Guardia Civil en la madrugada del pasado viernes en la localidad coruñesa de Portosín cuando manejaban en el maletero de un coche una bomba "muy potente", según fuentes de la investigación, mientras que el tercero fue detenido horas más tarde.

Las mismas fuentes consideran que la acción que pretendían llevar a cabo podría estar relacionada con otros atentados del ámbito radical gallego, como el cometido el pasado 15 de noviembre contra una inmobiliaria de Cangas del Morrazo (Pontevedra).

El artefacto explosivo que manejaban los jóvenes estaba compuesto por varias bombonas de camping gas e incluía una especie de reloj temporizador.