UN FISCAL ARGENTINO SOSPECHA QUE LA FISCALIA ESPAÑOLA ESTA SIENDO PRESIONADA POR LA CLASE POLITICA EN LOS CASOS DE DESAPARECIDOS

MADRID
SERVIMEDIA

El fiscal general ante a Cámara Federal de Bahía Blanca (Argentina), Hugo Carlos Cañón, manifestó hoy su sospecha de que la clase política española esté presionando al Ministerio Fiscal en los casos de desaparecidos españoles durante las dictaduras militares de Chile y Argentina, que están siendo investigadas por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.

Cañón, que profesionalmente ha destacado por su lucha contra la Ley de Punto Final y la de Obediencia Debida, aprobadas en 1987, señaló a los periodistas que, a su uicio, en la Fiscalía española hay una "hay una gran carga de parcialidad que puede, quizás, responder a una presión política".

Hugo Carlos Cañón, que declaró como testigo ante Garzón, añadió que en Argentina la corrupción ha llevado a ejercer infructuosas presiones para que los fiscales no investigasen, coacciones que disminuyeron a partir de 1994, cuando el Ministerio Fiscal se convirtió "en un cuarto poder".

En cuanto a Garzón, Hugo Carlos Cañón aseguró que admira su "integridad y tenacidad", sí como su "claridad de conceptos y de actuación" judiciales.

Este fiscal argentino relató la persecución a la que fue sometido por haberse negado a acatar el Decreto 1002, por el que el Gobierno de Julio Menem otorgó el indulto a los militares que estaban procesados por delitos cometidos en la dictadura.

En este sentido, explicó que rechazó acatar ese decreto porque su deber es respetar la Constitución y las leyes, "y no cumplir órdenes ilegales".

Asimismo, este fiscal argentino explicó ant Garzón como los militares argentinos diseñaron un plan para la represión de los opositores al régimen, estrategia que incluía el secuestro, la tortura e incluso el asesinato.

(SERVIMEDIA)
13 Sep 1999
VBR