Anasagasti aseguró con un contundente "creame a mí" que el portavoz de CiU, Josep López de Lerma, estaba invitado a la cena que peneuvistas y populares mantuvieron la víspera de la reunión de la ponencia y en la que supuestamente consensuaron una posición común respecto a la utilización de bonos bancarios para las donaciones a partidos menores de 250.000 pesetas.

El portavoz del PNV ijo no entender la postura de López de Lerma, aunque reconoció "su legítimo derecho" a hacer política "como le parezca oportuno".

"Lo que no se puede hacer es cansar a la sociedad. Está en su legítimo derecho de plantear lo que crea conveniente, pero que una cámara de televisión entre a una sesión secreta de una ponencia, y que un vicepresidente de esta Cámara, sabiendo lo que iba a ocurrir, no tuviera inconveniente en hacer un planteamiento de cara a los medios de comunicación" no fue bien considerad por Anasagasti.

Finalmente, el portavoz del PNV aseguró que no sabe lo que CiU quiere plantear, "porque tenemos la impresión de que CiU, como partido, está de acuerdo con el planteamiento de la ley".