El secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José María Michavila, explicó a Servimedia que la futura financiación de los partios "no es una cuestión que tenga que decidir el Gobierno", sino los grupos parlamentarios, razón por la cual el Ejecutivo no ha presentado ninguna iniciativa legislativa propia.

Los contactos entre partidos para elaborar una ley que regule esta materia se prolongan ya desdes hace dos años sin éxito, provocando sucesivos retrasos en la aprobación de una norma que todos los grupos consideran "necesaria".

El último episodio de desencuentros se produjo a mediados del mes de diciembre cuando la Ponenca que estudiaba este asunto tuvo que dar por conluidos sus trabajos si el acuerdo del mayor partido de la oposición. A partir de enero será la Comisión Constitucional la que retome este asunto con el mal precedente de la falta de acuerdo en la Ponencia.

Según Michavila, este asunto debe ventilarse en el Parlamento cumpliendo con las condiciones "fundamentales" de alcanzar el mayor apoyo parlamentario posible y de garantizar la transparencia y el control de las cuentas de los partidos.

"Estamos covencidos de que ese acuerdo se acabará consiguiendo, pero, en cualquier caso, el Gobierno no quiere condicionar las decisiones del Parlamento", aseguró.

Sobre la supuesta responsabilidad de los socios nacionalistas catalanes del Gobierno en estos retrasos, Michavila dijo que "no sólo CiU ha puesto dificultades, también el Partido Socialista, después de la sentencia de Filesa ha planteado problemas".