En rueda de prensa, García apuntó que el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), suprimido parcialmente por el Gobierno, "había que mejorarlo", ya que gravaba, entre otras cuestiones, la creación de empleo.

Pero la solución aportada por el Gobierno "es electoralista", puesto que se lo elimina a dos millones de pequeños empresarios "que votan", pero se lo sube a las empresas de mayor facturación, "que no votan".

La reforma generará, además, un aumento e los impuestos indirectos y de los precios, porque si a una empresa de telecomunicaciones como Telefónica, Vodafone o Amena se le elevan los costes, "los trasladarán al consumidor" mediante el aumento de precios.

Lo mismo sucede con el caso del Impuesto de Circulación, que podría subir hasta el 25% en 2003 para los ciudadanos como consecuencia de la supresión del IAE para las empresas. La operación acometida por el Gobierno "no es justa".