Montañés explicó que "no hay un acuerdo para que podamos recurrir conjuntamente desde las regiones socialistas ni tampoco instrucciones desde el PSOE fedral para que lo hagamos de una u otra forma".

"Nosotros tomaremos la decisión desde nuestra plena autonomía", añadió, "una vez estudiemos en profundidad el sistema de financiación, y desde el punto de vista jurídico y político, veremos si es posible recurrir".

El dirigente castellanomanchego indicó que han observado en el modelo propuesto por el Gobierno "algunos signos de incostitucionalidad", como una desigualdad en el trato fiscal y una falta de garantía en la solidaridad entre las regiones esañolas.

Montañés no quiso concretar si aplicará, a pesar del rechazo, este nuevo modelo, o si, por el contrario, se acogerá a una prórroga. "Hasta que no hagamos cuenta, no lo decidiremos, pero lo que no permitiremos es que nuestra comunidad pierda ni una peseta", advirtió.

Por último, el dirigente castellanomanchego criticó la postura de los gobiernos regionales del Partido Popular y manifestó que durante el Consejo de Política Fiscal celebrado ayer un consejero popular, cuyo nombre no facilitó,le dijo que "si no hubiera disciplina de partido, votaríamos contra el nuevo sistema de financiación autonómica".