Según informó este sindicato en un comunicado, este es un curso en el que algunas Comunidades Autónomas (CCAA) desarrollarán sus propias leyes educativas autonómicas y, por tanto, "reclamamos al Gobierno que muestre fortaleza y lleve a cabo una política de coordinación educativa".

Asimismo, UGT solicitó también "una inversión mínima del 7% del Producto Interior Bruto (PIB) en educación o la aprobación del Estatuto de la Función Pública Docente".

FETE-UGT reclama también "la implantación generalizada del tramo 0-3 años con carácter educativo y gratuito mediante una oferta pública suficiente; la cláusula de revisión salarial, que evite la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores y el reparto homogéneo, efectivo y real de todo el alumnado entre los centros sostenidos con fondos públicos, además de la disminución de las ratios para llevar a cabo una atención más personalizada".

Por último, FETE-UGT denuncia también el desequilibrado reparto de alumnos con necesidades educativas especiales, como sucede en la Comunidad de Madrid, donde el 80% está en los centros públicos y advierte de "los recortes de personal y recursos en los centros educativos que se están produciendo o que se puedan hacer con la excusa de la crisis económica, así como los incumplimientos de los acuerdos firmados con las organizaciones sindicales".