El director de la Benemérita subrayó como prioridad de la institución la mejora en la calidad de los servicios prestados, a cuyo fin abogó por adecuar la organización de la Guardia Civil mediante un sistema de funcionamiento descentralizado, moderno y eficiente.

"Debemos mejorar los planes de prevención para la seguridad ciudadana, incrementar la presencia policial, acometer con mayor profundidad la lucha contra los grandes problemas de nuestra sociedad y contra las nuevas formas de delincencia -el terrorismo, el narcotráfico, los delitos económicos, la delincuencia organizada-, convirtiendo en instrumento de uso diario los nuevos métodos que la tecnología pone a nuestro alcance", afirmó.

A su juicio, la Guardia Civil sigue siendo una institución "profundamente querida y valorada por la población española", porque ha sabido integrarse en el tejido social en que se desenvuelve y ha ido evolucionando a la par que la sociedad en sus aspiraciones y valores.